Cerrado por falta de conserje

Actividades en el Juan Caro

El miércoles 23 de febrero, un colegio en Melilla cierra sus puertas por no tener conserjes que abran las puertas. Ante esto, el Ministerio de Educación envía una nota aclaratoria a los padres. 

Ante la nota remitida por la dirección del CEIP Juan Caro comunicando a los padres de los alumnos que no envíen a sus hijos a clase por carecer de conserjes, la Dirección Provincial de Educación quiere aclarar que esta decisión ha sido adoptada de forma unilateral por el propio colegio.

La Dirección Provincial, puesta en contacto con la Consejería de Educación, de quien depende la dotación de conserjes a los centros escolares, recibe como respuesta que el centro cuenta con el número de ordenanzas suficientes y que no encuentran razón alguna para que se haya decidido comunicar a los padres que no envíen a sus hijos a clase.

El director provincial de Educación, José Luis Estrada, quien califica de inexplicable lo sucedido, ha adoptado una serie de medidas tendentes a aclarar la situación y exigir responsabilidades. Así mismo, anuncia que mañana jueves proseguirán las clases con absoluta normalidad, aclarando que, en todo caso, la plantilla de docentes con las que cuenta el colegio sí ha asistido hoy a su puesto de trabajo.

En todos los años que llevo trabajando en educación, nunca había visto y oído de un caso de tales magnitudes. Es más, me resulta realmente sorprendente a dónde hemos llegado con la educación en Melilla. Y más sorprendente aún es que el informe PISA indique que en Melilla sólo exista el 42% de fracaso escolar. Personalmente creo que, con tanta fiesta (cuando no es cristiana es musulmana y sino hebrea, pero la cuestión es que aquí se celebran todas las celebrables y más), y tanto desaguisado de cierres y aperturas los que realmente sufren son, una vez más, los niños y niñas que tienen que recibir educación. Mientras nosotros, los "adultos" discutimos y analizamos de quién es la culpa, de quién es la competencia, de quién...

La semana pasada fue el año Tagmazig, esta ha sido la falta de un conserje, la que viene es carnavales y ¿la siguiente? Vamos que todas las semanas tenemos algún motivo para dejar a los niños en casa y no llevarlos al colegio. Indignante.