Aceras casi nulas |
Salir de casa y encontrarse con esta imagen es algo típico en Melilla. Hay barrios en los que las aceras se convierten en aparcamiento. Y claro, uno no puede pasar por la acera y debe bajar a la carretera o bien le queda un espacio pequeño por el que debe pasar rozando el coche o la pared.
En parte el problema se debe a la gran cantidad de coches que existen en Melilla. Según los últimos estudios la mayoría de las familias tienen dos coches. Y eso que sólo tenemos 12 kilómetros cuadrados para movernos.
Pero es que muchos tienen el todoterreno para ir a la playa a Marruecos y el coche utilitario más pequeño con el que se mueven por la ciudad.
Lo cierto es que uno se las tiene que ingeniar para aparcar el coche donde sea. Y cuando obtuve esta foto había pocos, porque si la llego a tomar a las 2 de la tarde, apenas queda espacio en las aceras y calles para moverse, porque se junta la salida del trabajo con la salida de los colegios.
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