Edificio La Llave |
Las Bases a las que deberán sujetarse las construcciones son, entre otras: tendrán por lo menos dos pisos sin poder exceder de cuatro, ni de veinte metros en la altura de sus fachadas. Estarán construidos con mampostería, ladrillo, sillería, etc., y en sus entramados se empleará exclusivamente el hierro o acero. Las fachadas ejecutadas con revoque de cemento, piedra artificial, ladrillo prensado, sillería tallada o mármol serán artísticas (sic).
Ojo de buey |
Edificio La Llave |
El inmueble, de planta baja y dos pisos, destinará sus bajos para fines comerciales, derivándose de ello la descentralización de la entrada principal y el modo de acceso a las viviendas superiores (2 y 2) hacia su extremo derecho. Completamente reformada en la actualidad esta sección inferior, se accede a las residencias por el interior del Pasaje Avenida, posibilitando, en su parte externa y dada su altura primitiva, la creación de un entrepiso.
El diseño del inmueble para esta parte, se limitaba a una sucesión de arcos deprimidos desdoblados en altura, de cuyo punto de unión, cual pinjante, se desarrollaba el motivo vienés del círculo que se ramifica a través de sus tres bandas. Los pisos superiores quedarán rematados por esa línea de cornisa, con terminación en guirnalda, y resultados por el enmarque de su balconada, que motiva el sobrenombre del edificio.
Detalle de la ventana |
Los paramentos, englobados por ese gran conjunto lineal, hoy enlucido, se dibujaban con una sillería simulada que enlazaba con las molduras de las luces. Como eje central, la línea que traza la inflexión de la llave desde su hoja de acanto y se refuerza atravesando el centro del ojo de buey orlado con el follaje y la flor «permanente».
Es, sin lugar a dudas, el primer edificio modernista de intenciones plenas que lucha con la superficie y ubicación concedida, buscan lo curvo en lo lineal. En él, se ve la línea seguida por el arquitecto contraponiendo actitudes ornamentales francesas —pisos superiores— y austriacas —planta baja (desaparecida)—, que tienen su ámbito completamente independizado.
Detalle del ojo de buey |
A mediados del siglo pasado, la propiedad del inmueble corresponderá a D. Isaac M. Levy Carciente. En sus bajos, encontramos, a la izquierda del pasaje, la «Joyería Orly» y, a su derecha, «Calzados El Precio Loco», que sucede a «Blue Silver Fashion S.L.» y, anteriormente, a la «Cafetería Pasaje». Dicho edificio, horadado en sus bajos para comunicar con la Avenida —proyecto de D. Eduardo Caballero Monrós, a principios de los sesenta—, presenta en su interior, la composición musitaría de los pintores melillenses D. Eduardo Morillas y D. José Peña (1963), que recrea el paisaje urbano de una Medina con cinco personajes en primer término, donde sobresalen: un músico con una flauta encantadora oriental de doble tubo, un vendedor de vasijas y un sacamuelas.
Balconada |
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